domingo, 2 de abril de 2017

Rambla de Tobarrillas (Yecla)


Por la Rambla de Tobarrillas
En un bonito día de primavera, fresquico, hoy día 2 de abril de 2017, el grupo Hinneni nos hemos desplazado a los confines de la Región de Murcia, entre Yecla y Almansa. Nuestra guía Cati, nos ha hecho una bonita ruta, diferente y amena.

Se empieza en las casas Tobarrillas Baja, punto kilométrico 14 de la carretera de Yecla a Almansa. Nos dirigimos hacia el oeste para subir a Los Montes de las Tobarrillas buscando la línea de cumbres en las que se encuentra un parque eólico. Dejamos a nuestra derecha el barranco del Francés. Una vez en la cumbre, continuamos por la pista por la derecha hasta el último aerogenerador en el Cerro de la Graja de 948 msnm. Nos hemos adentrado un poco en el monte para divisar hacia el este los llanos ocupados por un fuerte color verde, fruto de las abundantes lluvias y nevadas de este invierno. Aquí y de cara al sol hemos almorzado.

Vuelta por la pista unos pocos metros hasta encontrar a nuestra izquierda una señalada senda que nos baja por el Barranco Ancho hasta la carretera que cruzamos por un subterráneo. El cauce nos lleva en unos pocos metros a la Rambla de Tobarrillas. Primero subimos hasta su inicio para apreciar cómo el agua corre por algunos sitios entre charcos de diferentes tamaños. Apreciamos  numerosas bocas del minado que discurre por el fondo de la rambla y por el que discurre un buen chorro de agua.

Ruta aproximada
Una vez que llegamos al inicio de la rambla, volvemos en el sentido de las aguas hasta llegar al punto de inicio. Apreciamos los numerosos destrozos que ha causado la nieve en los pinos, el “Pino elefante”, los restos de una calera… en definitiva, una interesante y entretenida ruta del término municipal de Yecla.
ENLACE PARA VER MÁS FOTOS:

https://goo.gl/photos/ddH7TkXBbCJ5GPqW6

domingo, 26 de febrero de 2017

Los Odres, Los Obispos y Revolcadores

Día 26 de febrero, día totalmente primaveral hemos hecho el grupo Hinneni una impresionante ruta por este lugar emblemático de la Región de Murcia para alcanzar el techo de la región. No es la primera vez que lo hacemos, pero cada vez que nos acercamos hasta allí nos sorprenden nuevos barrancos y nuevas  vistas, en esta ocasión totalmente despejado.

En Los Odres
Hemos empezado la ruta en el poblado de Los Odres pero no  nos hemos dirigido al Barranco del Rey, que separa los Odres de Revolcadores, sino que nos hemos dirigido ligeramente hacia la derecha del poblado empezando a subir ya por la suave ladera de este monte que se culmina en su cima a 1.878 msnm. De allí descendemos por los últimos restos de nieve de la umbría hacia el collado del Pino Gordo para continuar subiendo por una gran extensión de terreno rocoso a encontrarnos, una vez hemos cumbreado la primera cresta, con la senda que viene desde Inazares y que sube a la cima.
En el Obispo u Obispos, lo he visto de las dos maneras
Seguimos viendo los últimos neveros y llegamos los Obispos (2.014 msnm), techo de la Región de Murcia. Para completar la jornada solamente hemos de avanzar unos 700 metros para llegar a la cumbre de Revolcadores  (1.999 msnm). Volvemos sobre nuestros pasos y justo entre las dos cimas, a mano derecha nos encontramos un barranco por el que hemos bajado sin dejarlo en ningún momento y muy agradable de caminar y que nos he llevado de nuevo a la pedanía de los Odres. Cerca de 8 hora  en contacto directo con la naturaleza y disfrutando una agradable compañía con los integrantes de la ruta.
En Revolcadores
En este enlace puedes ver y descargar las fotos de la ruta:

https://goo.gl/photos/5biFbnPKpXzVEE8x8

En este enlace podemos ver otra ruta muy parecida realizada en el 2013, pero en unas condiciones meteorológicas completamente diferentes.
Mapa de la zona de la ruta
 

domingo, 22 de enero de 2017

Ruta por el Carche nevado

Grupo de senderistas en las ruinas de la Casa del Mosquito
Hoy 22 de enero un montón de senderistas del club Hinnei hemos realizado una ruta espectacular por nuestro Carche completamente nevado desde el inicio de la ruta. Muy pocas veces en Jumilla tenemos la suerte de andar kilómetros y kilómetros pisando un gran espesor de nieve como en este caso, y lo hemos disfrutado por si acaso pasan otro montón de años apara que se produzca otra nevada como la de la semana pasada.

Nuestro guía, Paco, que después de haber realizado trece días de camino de Santiago por la costa del cantábrico, aun ha tenido fuerzas para subirnos por un lugar del Carche con nieve totalmente virgen y que no ha sido pisada todavía por nadie. Nos ha llevado a la umbría, cerca de la Fuente de la Sanguijuela y hemos empezado la lenta subida por La Morra Sorda hasta el collado de Garcés (palomar), para cruzar la pista y seguir subiendo por los espectaculares puntales del Jarral hasta el mismo pie de la Morra Oscura, donde hemos tomado la bajada por la senda del Mosquito, ya que el espesor de la nieve dificulta la caminata y si hacíamos cima se habría alargado la ruta un par de horas más.

Aquí podéis disfrutar de un álbum de fotos:


https://goo.gl/photos/ER9pdNPNWfoCqTy77


Desde el Puntal del Jarral. Jumilla al fondo




sábado, 3 de septiembre de 2016

Refugio de Poqueira-Albergue Universitario (Sierra Nevada)


Subiendo por el barranco del río Mulhacén
El segundo día tenemos que volver al punto de inicio de la ruta del día anterior, teniendo como lugar más elevado el collado de las Carhiuelas que se encuentra a 3205 metros y a los pies del Veleta. Partimos de 2500 metros, con lo que el desnivel es considerable pero poco a poco vamos remontando, primero por el valle del río Mulhacén, que cruzamos para cruzar  la ladera que nos conduce al otro barranco, el de Río Seco que como su nombre indica, no lleva ahora ni gota de agua. Hacia el sur vemos el gran barranco de Poquiera formado por la unión de los ríos Mulhacén y Río Seco con la Sierra de Lújar justo enfrente. Tenemos el aliciente de observar varios ejemplares de cabra hispánica, unos solitarios, y otros en grupo que tranquilamente seguían con su camino a pesar de meternos en su territorio.

Cruzando el río Mulhacén
Al llegar a la laguna de Río Seco, hemos almorzado con unas bonitas vistas y hemos llegado a la pista del día anterior. Al pasar la subida al Cerro de los Machos unos pocos hemos cogido la senda de la derecha y Santi nos ha llevado por el Paso de los Guías, un paso volado que nos ha recordado a nuestro paso del cable de la Sierra del Buey pero que yo creo que este acojona más por ser más estrecha la repisa. El paso de los Guías, te ayuda a recortar el recorrido de la pista entre el cerro de los Machos y el collado de la Carihuela, aunque apenas en unos pocos minutos. El paso en cuestión, es una pequeña travesía horizontal en la pared sur-este del Veleta de unos 20-25 mts y está equipado con una cadena quitamiedos.

Una vez en el collado de las  Carhiuelas, hemos empezado el largo descenso a través de pistas y sendas hasta el albergue observando la estación de esquí y sus numerosas pistas, claro está, sin ninguna nieve. Solamente hemos visto un pequeño nevero en estos dos días, precisamente en la solana y cerca del refugio de las Carhiuelas.

En resumen: 14,74 km, durante un tiempo total de 5 horas y 41 minutos.

 
En la laguna de Río Seco
A los pies del Cerro de Los Machos
Delante de la Virgen de las Nieves
Enlace a wikiloc con el track de la ruta de nuestro compañero José Díaz:
En la Puerta
 

viernes, 2 de septiembre de 2016

Veleta-Cerro de los Machos-Mulhacén


Collado y refugio de la Carihuela
Una buena representación del grupo Hinneni de Jumilla hemos realizado durante el fin de semana del 26, 27  y 28 de agosto un par de rutas por Sierra Nevada que nos dejarán huella en nuestro currículo senderista. La primera de ellas es:

Veleta-Cerro de los Machos-Mulhacén:
Como podemos ver son tres tresmiles, entre los cuáles se encuentra la máxima altitud de la Península Ibérica. Ruta larga y muy dura que una vez realizada te deja un muy buen sabor de boca y la satisfacción de haber conseguido un importante reto.

Hemos empezado la ruta  en el lugar en el que hemos pernoctado, es decir, en el Albergue Universitario de Sierra Nevada, a una altitud de 2.500 msnm.  Siguiendo siempre en dirección sur hacia el Veleta, que a estas horas no veíamos ya que hemos empezado a andar a las 6.30. La senda nos va elevando en metros poco a poco y vamos cruzando en numerosas ocasiones la carretera que sube a las pistas de esquí, considerada la carretera más alta de Europa hasta que fue cerrada al tráfico en 1.999.

Una vez que la claridad del amanecer nos lo permitía, teníamos más claro nuestro primer objetivo de la jornada y que es fácil de descubrir debido a su característica silueta.

En el último tramo, la pendiente de hace más pronunciada y logramos llegar el vértice geodésico sobre las nueve. Descansamos, observamos y vemos en todas direcciones lo que nos ofrece la naturaleza, especialmente en dirección este, la impresionante caída que nos ofrece el Veleta  al fondo, el Corral del Veleta.

Una vez inmortalizado la hazaña, nos disponemos a bajar dirección oeste, por la línea de cumbre hacia el collado de la Carhiuela, donde está el refugio de montaña y donde nos disponemos a almorzar a una altitud de 3.200 metros.

Vistas hacia el sur desde la Carhiuela
A continuación seguimos bajando por la pista y observamos una de las numerosas lagunas que van jalonando la ruta, la laguna de aguas verdes. Nuestros guías, Santi y Roque nos van conduciendo ahora hacia nuestro segundo objetivo de más de 3000 metros, el Cerro de los Machos, (3327 m) llamado así por concentrarse en este lugar los machos de las cabras ibéricas que abundan por estas sierras. Empezamos de nuevo a subir cerca del pie de la pared del Veleta, entre impresionantes pedregales y roca suelta procedente de la erosión de la pared. Una vez llegados a la línea de cumbre del crestón existente entre el Veleta y Los Machos, volvemos a ver el Corral del Veleta y ya con mucha más precisión, la cima del cerro al que nos dirigimos. Lo corona un gran hito de piedras  y estamos entre los dos colosos: el Veleta y el Mulhacén. Las vistas hacia los precipicios de la cara oeste dan miedo por la impresionante altitud.


El pico del Veleta desde el cerro de los Machos
Bajamos del Cerro de los Machos por la línea de cumbre que da a Vasares del Veleta, El Campanario, Hoyos del Veleta... para buscar la bajada a la pista.

Cerro de los Machos
Una vez en la pista, giramos a nuestra izquierda para dirigirnos a nuestro tercer y último objetivo: el Mulhacén. Tenemos la suerte de que no hace un calor excesivo lo que se agradece porque así se nos hace más soportable el esfuerzo.

Mirador hacia el Corral de Valdeinfierno o Carrales del Veleta
Por esta pista vamos observando algunas lagunas a nuestra derecha, y por la izquierda nos asomamos en un par de ocasiones hacia la parte norte: los Corrales del Veleta o Corral de Valdeinfierno, Laguna Larga y Laguna Galbata con unas vistas que acojonan. Pasamos por  una especie de puerta, que precisamente se llama “La Puerta” hacia la vertiente de Río Seco, dejando a nuestra derecha los Crestones de Rio Seco y acercándonos poco a poco hacia el Mulhacén. Pronto dejamos la pista y empezamos a subir hacia el collado Loma Pelá por una senda muy evidente. En el collado volvemos a sorprendernos con una bajada pronunciada y una senda larguísima que nos llevará hasta el refugio de la Caldera, a 3065 msnm, no sin antes ver desde lo alto la Laguna del mismo nombre.

Laguna de Río Seco con el Mulhacén al fondo
Desde el refugio observamos con un poco de temor la impresionante cuesta que nos queda para llegar a la cima. Se trata de la Pala del Mulhacén, que con una senda supermarcada, salva un desnivel de más de 500 metros que con el cansancio que ya llevamos acumulado nos va a hacer bastante difícil la subida.

Laguna de la Caldera
Poco a poco vamos subiendo un metro tras otro y la recompensa es la cima de la península. Hemos conseguido nuestro tercer objetivo.

Ultima subida hacia el Mulhacén
Después de deleitarnos con las vistas, procedemos a bajar, y vamos a comer a otra cima menos concurrida de gente y que podríamos decir que es nuestro cuarto tres mil de la jornada: se trata del Mulhacén II (3362 m). Después de comer y descansar seguimos bajando, ahora hasta los 2500 metros en el que se encuentra nuestro objetivo final, el refugio de Poqueira.

El paisaje es el típico de alta montaña, los árboles brillan por su ausencia y la variedad de plantas es muy pequeña, destacando los musgos. Abundan las especies cespitosas de típico porte almohadillado. La radiación solar es alta, hay fuertes vientos, las temperaturas son extremas y hay una gran sequia estival. 


También una planta con flores amarillas en los lugares más resguardados del viento.

En resumen: 21,44 kilómetros y 11 horas y 11 minutos de ruta en el que se incluyen los descansos y que todos los componentes del grupo, incluida nuestra ejemplar e incansable Juanita, hemos conseguido superar.

En este enlace podréis ver el álbum de las fotos:

https://goo.gl/photos/AdwxcXnKTiXvRcah7

Track de la ruta de nuestro compañero José Díaz:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=14560774

domingo, 5 de junio de 2016

Barranco de los Lobos-Crestón del Cantal-Barranco de la Higuera


Barranco de los Lobos
Interesante ruta por la parte sur del Carche realizada el día 4 de junio explorando por primera vez el Barranco de los Lobos en el que terminan los Cocones del Carche.
Hemos empezado la ruta en La Alberquilla y hemos atravesado esta bonita pedanía de Jumilla para dirigirnos al norte buscando las laderas sur del Carche. Hemos subido por el camino que pasa entre la Loma de la Atalaya y la Loma de las Areniscas y hemos seguido el camino principal hasta que nos hemos girado a la izquierda para ir buscando el cauce seco del Barranco de los Lobos.
Otro aspecto de la espesura del Barranco de los Lobos
Se trata de un barranco largo y poco accesible debido a la abundancia de vegetación y de restos de maderas de pinos muertos. A nuestro gusto, no es tan bonito como los barrancos del Zurrior o de la Higuera que están entre los otros Cocones. Una vez que hemos pasado su angostura, se va abriendo cada vez más hasta llegar a la pista a la izquierda del Collado de las Cabras.

Hemos seguido subiendo por el barranco una vez cruzada la pista hasta su inicio y hemos continuado subiendo a la  Loma de Maza. Después hemos seguido por la Loma de la Replana (máxima altitud: 1089 msnm), haciendo la Cresta del Cantal hasta donde la senda cruza a la vertiente sur. Alcanzamos la pista y la subimos hasta el barranco de la Higuera que lo hemos bajado y girado a la izquierda por la senda que queda justo en los límites del monte. Hemos cruzado el final del Barranco del Zurrior y seguido hasta el Cuco de la Alberquilla y de nuevo al punto de inicio.
13,5 km que hemos realizado en cuatro horas.
Pino en un lugar imposible

el Barranco de los Lobos se va abriendo

Barranco de la Higuera

Otra vista del Barranco de la Higuera

Cuco de la Alberquilla

Cuco de la Alberquilla


Bonito ejemplar de encina cerca de la Alberquilla

Cantueso en todo su explendor

lunes, 30 de mayo de 2016

Los 6000 escalones. Barranco del Infierno

Día 29 de mayo de 2016. El Grupo Hinneni ha llevado a cabo en este día una interesante ruta: la comúnmente llamada “Catedral del senderismo” o ruta de los 6000 escalones. Es una ruta que todo senderista debería de hacer por lo menos una vez en su trayectoria senderista, para,  a parte de conocer sus fuerzas y posibilidades, contemplar estos paisajes espectaculares y estos barrancos sin fondo, especialmente el del Barranco del Infierno o Barranc de L´Infern.
Vall de Laguart es un municipio alicantino de la comarca de la Marina Alta de cerca de 900  habitantes formado por los núcleos de Fleix, Benimaurell, Fontilles  y Campell.
Situado a una media de 500 metros de altitud se eleva entre dos sierras que conforman este hermoso valle. A un lado el Barranco del Infierno, maravilla natural, formada por el río Girona, que separa la Sierra de la Carrasca o de Ebo (de 1.000 msnm) de la Sierra del Migdia y atraviesa todo el valle hasta llegar al embalse de Isbert (embalse que en realidad no existe ni funciona). Al otro lado, como un auténtico caballo dormido, la Sierra del Cavall Verd o Sierra del Penyó (de 800 msnm de altitud) con multitud de fuentes y manantiales.
Estos escalones proceden de la época morisca, cuando estas gentes poblaban estos inhóspitos lugares tratando de sacar a estas empinadas vertientes un resquicio de tierra para abancalarlas mediante  terrazas y colocar un olivo, un almendro…  Felipe III, hijo de Felipe II, firmó el famoso decreto de expulsión de los moriscos escuchando los reclamos de los cristianos sobre los abusos, sacrilegios e indisciplina de los moriscos. Hay que recordar que su abuelo Carlos I obligo a estas gentes a bautizarse para no ser expulsados. Muchos de ellos para no salir de estas tierras y perder sus bienes, se vieron obligados a ello, lo cual provocó nuevos disturbios.
Vall de Laguar fue último reducto de la sublevación de los moriscos valencianos. En noviembre de 1609, ante su debilidad se rindieron y fueron expulsados definitivamente y conducidos al norte de África. El 14 de junio de 1611, Vall de Laguar era repoblado mediante escritura de nueva repoblación, por agricultores procedentes de la isla de Mallorca, descendientes de los antiguos repobladores catalanes de las islas.
Bonita calle de Benimaurell
En esta página web podéis ver la interesante historia de estos remotos escalones:
La descripción de la ruta no la hago, ya que hay numerosas páginas web en las que se explica el recorrido de 13 kilómetros con todo lujo de detalles. Decir que nosotros la hemos empezado en Fleix. Este enlace tiene una descripción de nuestro recorrido:
Como se describe en la página, la hemos empezado en Fleix, y hemos tardado 5 horas en llevarla a cabo, hemos salvado un desnivel de 971 metros y efectivamente nos han salido los 13 kilómetros que en ella se indican.
Ruta subida a wikiloc.
Panorámica de Campell desde el restaurante Cavall Verd. En el monte de detras se aprecia la muralla de Fon tilles
Hemos terminado la ruta en Fleix, en el lugar del inicio y hemos comido en el restaurante Cavall Verd. Desde el mirador del restaurante se ve perfectamente enfrente una larga muralla que se eleva igual que el monte y se adapta a su relieve. ¿Una muralla medieval? ¿Se construyó para separar pueblos rivales? Nada más lejos de la realidad. Se trata de la muralla que rodea a la última leprosería de nuestros tiempos, la de Fontilles. En el interior de esta muralla hay una auténtica ciudad donde destaca el Sanatorio San Francisco de Borja, fundado en 1909.
El Sanatorio abarca unas 70 hectáreas de parajes de gran belleza, espacios mágicos, rincones de paz y tranquilidad, donde la naturaleza se muestra generosa con el residente.

Esto no son cerezas, aunque también están buenas
Desde el punto de vista del programa, la leprosería responde al concepto de una ciudad cerrada, autosuficiente, con la práctica totalidad de los servicios; así, dentro del espacio delimitado por la muralla que la circunda, se abre una ciudad con sus huertas que trata de satisfacer las necesidades de una población peculiar, disponiendo de iglesia, teatro, imprenta, talleres, clínica, cárcel, etc. todo ello disperso entre un entramado de espacios libres.
Esto si que son cerezas, y estaban riquísimas.