La ruta, hasta la Cala del Bolete Grande la hemos hecho siguiendo el GR-92 que atraviesa todo el litoral murciano. La hemos iniciado en la playa del Portús dirigiéndonos hacia el oeste subiendo el monte hasta encontrar un sendero muy marcado con las señales blancas y rojas, que por cierto están muy seguidas y muy recientes, con lo que es casi imposible perderse.
En general, este primer tramo es escarpado con algunas zonas de recorrido muy aéreo por acantilados en los que hay que ir con mucho cuidado, motivo por el cual mi amigo Paco no ha aparecido por allí.
El sendero va subiendo y bajando por numerosas ramblas, llamadas por los cartageneros vaguadas en las que se hacen más presente la flora de la zona, entre las que destacan el pino carrasco, las cornicabras periploca, el famoso palmito cartagenero y gran variedad de plantas aromáticas como el tomillo, el romero y la lavándula que me llamó la atención que en estas fechas tan tempranas estuviera en plena floración.
Al llegar a los 2,4 km se llega a los famosos Amarillos, paredes de arcilla en la que predomina este color y gran gama de ocres, en donde el sendero se pone un poco más dificultoso, y en el que en algunos tramos hay que echar el culo al suelo.
Pasados los Amarillos, la senda se acerca a una gran pendiente que asciende hasta el collado de la Aguja de 252 metros. Desde aquí se puede llegar a la famosa Casa del Comandante, construcción militar, igual que muchas otras que se esparcen por todo el litoral cartagenero. También, algunos hemos subido hasta la cima (282 m) en el que hay otra construcción de vigilancia militar desde dónde se observan unas vistas impresionantes de toda la bahía de Cartagena y la Sierra de la Muela.
Bajamos de nuevo al collado de la Aguja y nos disponemos a bajar por una fuerte pendiente pero por una senda en muy buen estado a la playa de Cala Aguilar.
Decir que desde este collado podemos tomar a la derecha una pista militar muy marcada que nos lleva a las alturas de la Sierra de la Muela y poder bajar de nuevo al Portús por si queremos hacer una ruta circular, que seguro que algún día haré si encuentro algún valiente que me acompañe.
En Cala Aguilar, una bonita playa, almorzamos y recreamos la vista con las olas tranquilas que llegan hasta la arena. Los que en el verano se quieran bañar en ella deben de hacer un gran recorrido a pie por fuertes pendientes o acceder a la misma por barcas. A la izquierda de la playa se encuentra la cueva de Neptuno o de la Virgen, aunque se necesitan cuerdas para descender ya que dicen que tiene unos 15 metros de profundidad y que el agua que tiene en el fondo es dulce a pesar de estar al lado de la playa.
Seguimos avanzando por el GR subiendo y bajando vaguadas hasta encontrar una grande que se adentra en la Rambla del Morteral. Al llegar justo al enlace con una antigua pista, se encuentra la fuente del Morteral, pero que no hemos visto. Cogemos la pista a la izquierda y nos llevará a una casa aislada. Se trata del Cuartel de Boletes, con una balconada preciosa hacia el mar.
A continuación de la casa seguimos un poco por la pista y pronto descendemos por un camino dirección el mar, hasta encontrar de nuevo el sendero del GR que nos llevara viendo más calas hasta la Playa Grande de Boletes. Allí hemos descansado a la sombra de las paredes del acantilado para después iniciar la subida por la Rambla de Boletes que ya no dejaremos hasta llegar al Collado de Boletes, dando cara ya al campo de Campillo de Adentro y viendo ya el Golfo de Mazarrón. El GR lo dejamos al poco de entrar en la rambla. Esta rambla es bastante agradable ya que tiene mucha roca viva y de muchos colores y muy poblada de adelfas o baladres.
En Campillo de Adentro cogemos la rambla de la Azohía que nos llevará a esta pedanía cartagenera. Manolo dice que esta rambla también se llama Rambla de la Bocaoria. La llegada ha sido justo a las 14:00 horas por lo que la ruta, con descansos incluidos ha durado seis horas en las que hemos recorrido 15 kilómetros.
Después hemos dado buena cuenta de una buenísima paella de marisco en el Restaurante la Azohía.
LA AZOHÍA: es un pueblo de origen pesquero en el que se practica una de las técnicas pesqueras más antiguas y original. Se trata de las almadrabas, un arte de pesca formada por un conjunto de redes que forman un cerco laberíntico con forma de copo que obliga a los peces a salir a superficie y concentrarse en este y que los pescadores con barcas en círculo, los capturan alzándolos con ganchos hasta la cubierta. Ya en 1850, el diccionario de Pascual Madoz hace referencia a la almadraba de la Azohía en donde los peces, y sobre todo los atunes y bonitos vienen por la costa y al llegar a la punta de la Azohía se encuentran con la almadraba, punto de paso obligado.
(Apuntes tomados del libro “GR92 Región de Murcia-España” de Andrés Ros, Ventura Valero y José Luis Llamusí)
Cuartel de Boletes |
Cala de Boletes, al fondo |
Desembocadura de la Rambla de Boletes |
Palmitos y adelfas en la Rambla de Boletes |
Restaurante La Azohía |
Rambla del Morteral |